UNA COMO TRAGEDIA, Y LA OTRA COMO COMEDIA
Sentenciaba Carlos Marx, al referirse sobre Hegel, que la historia se repite dos veces, a lo que Marx añade, una como tragedia y la otra como comedia. Es una frase antiquísima pero de profundo y hondo análisis, contrastado con la actualidad, con los procesos económicos y sociales, con las oportunidades que pueden los pueblos, y las vuelven a perder por esa tara de “empezarlo todo otra vez”. Voy a referirme solo a los problemas que hoy en día están en boga, como es la depredación y hurto legal de nuestros recursos mas preciados, (sin menoscabar a otros, claro), como es sin duda la minería en el Perú. Comenzare especificando mi sentencia inicial en la historia minera de América latina en principal de Bolivia para luego referirme a nuestra situación, involucrando a ancash y a Cajamarca especialmente. Como sabemos, en los tiempos del virreinato, se exportaba de este “nuevo” mundo, todos los recursos para fortalecer la economía occidental y darle los cimientos económicos al incipiente capitalismo que emergía en los países de Inglaterra y holanda, mas no en España y Portugal dueños de la vaca, como decía Eduardo Galeano. La historia demuestra que Bolivia el Perú y Brasil principalmente, eran poseedores de las ingentes cantidades de minerales que se exportaron a occidente, y es testigo también de que la historia se repetía en ese tiempo como tragedia, en primer lugar por los millones de muertos que se tragaron las minas de Potosí, Minas Gerais y la mina de Mercurio en Huancavelica, en segundo lugar por el impacto económico que esto reflejaba en estas ciudades que algún día fueron metrópolis de poder económico, con un crecimiento mas no un desarrollo, y que hoy se presentan como las ciudades mas pobres de su respectivo o país, con todos los problemas de impacto ambiental que trajeron consigo la explotación irracionalizada de esas minas. Esa fue la tragedia que la historia nos muestra reveladora de sinsabores y de silencios mas parecidos a la estupidez que nos contagiaron. La historia se repite dos veces, y esta es la segunda, observamos con no poco estupor las explotaciones mineras de oro mas grande de toda Latinoamérica, y por que no decirlo del mundo, Yanacocha y Antamina, que financian los grandes capitales internacionales saquean de nuestra madre tierra colosales cantidades de minerales, dejando solo un porcentaje irrisorio, mas los problemas medioambientales que se materializan hoy en enfermedades y muertes lentas de nuestros hermanos campesinos que allí habitan, nosotros conocemos bien su proceso y su desarrollo, a lo que apunto es que la historia esta vez se repite como comedia, por que estúpidamente creemos en el desarrollo coyuntural y ficticio de Cajamarca y Huaraz, que han atiborrado en negocios y demás actividades terciarias, conformándose como las nuevas “metrópolis”, y pueblos “ricos”
Gente con potencial económica, que demuestran una vez mas su crecimiento económico mas no su desarrollo, entendido este como la realización personal tomando dimensiones como derechos, potencialidades, equidad de genero, sostenibilidad y las que queramos fuera del dinero coyuntural que ahora esta es sus bolsillos, y no se piensa en que los recursos que están allí no crecen como plantas sino se acaban, y si se acaba los capitales que sostienen sus economías se van, dejando consigo, tierras improductivas, ríos contaminados, gente enferma, y como el dinero irónicamente se acaba, gente pobre, contaminada, y nostálgica por los buenos tiempos…esa si es en verdad una COMEDIA, el peruano esta tan acostumbrado a cometer los mismos errores siempre, nose si por inocencia o estupidez, entonces no hace falta analizar los impactos sociales y económicos en esos lugares, si la historia nos demuestra como quedan las zonas ricas en recursos naturales, de dueños internacionales, triste panorama, no quiero sonar fatalista, solo intento brindar a mi sencillo modo de ver el mundo, las consecuencias que trae el uso irracional de los recursos como en este caso la minería, una comedia mas de los comediantes peruanos.
CASTROMONTE RODRIGUEZ, CARLOS
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